Nadie debería perderse este documental sobre las competiciones de jugadores de videojuegos "retro" de recreativas. Ni siquiera a los que, como yo, no tengan ningún interés en los videojuegos. Como documental es perfecto pues nos descubre un mundo, que al menos para mi, y para la mayoría, estoy seguro, nos es completamente desconocido. Y es que son personajes -marginales es decir poco- para los que competir en máquinas recreativas antiguas, es su vida.
Pero lo más alucinante es la importancia que le conceden a dicha actividad (para ellos es como un deporte olímpico, y realmente creen que es una disciplina olímpica, actúan como si fueran atletas, auténticas estrellas). Descubriréis a personas, para las que una actividad tan tediosa como visionar una partida de varias horas de duración, grabada en vídeo, es un asunto oficial, serio y muy importante. Tipos capaces de amañar dichas cintas, amenazar de muerte, mentir o engañar, solo por seguir ostentando estos records, conseguidos hace décadas. Records, que fuera de ese delirante microcosmos no le importan a nadie. Personajes realmente memorables como Bill Mitchell, cuyo amor por si mismo no conoce límites y se considera un dios entre hombres. Que al conocer la expectación que genera en una sala recreativa el visionado del vídeo en el que se hace con su record, es capaz de afirmar totalmente en serio: "He generado más expectación que Helena de Troya".
Aunque en principio resulte un poco ajeno este mundo, es imposible no sentir fascinación por esta panda de freaks capaces de adorar como a una estrella del rock, una eminencia, una leyenda... a un tipo que consiguió un record en el Donkey Kong hace décadas... Personajes extravagantes, tan extremos y únicos, que no parece ser posible que existan en la realidad. Es como si hubiesen salido de alguna comedia americana extraña.
Lo más asombroso del documental es como muestra este mundo, como engancha y logra que te fascine e interese. Y finalmente, que te involucre en las rivalidades más allá de toda racionalidad, de las que son presa sus dos protagonistas. Conduciéndote a un final emocionante y hasta bonito. Haciendo que recuerdes a todos estos tipos tan realmente extraños, mezquinos y definitivamente divertidos. No os lo perdáis.
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